Resulta lamentable la "indefinición municipal" de las medidas que se deberán emprender. Si el gobierno municipal tiene la competencia, tiene la obligación de explicar cómo resolver el problema inmediatamente. Mientras tanto, es recurrente culpar a las administraciones (tanto las actuales como las anteriores) de la situación por falta de previsión: "la incompetencia política que no han sido capaces de prevenir, una situación de emergencia por la sequía”.